La Escuela Primaria "Ricardo Flores Magón", institución pionera de la educación en Pátzcuaro, por sus aulas han pasado hombres y mujeres que abrevaron la luz del conocimiento para posteriormente incorporarse a las variadas trincheras de la vida...
En esta escuela estuvieron mis familiares maternos y paternos, su pórtico dio la bienvenida a su estancia, desde parvulitos hasta el sexto grado... allí llegué un día lluvioso de septiembre después de haber perdido casi dos años por andar en la Ciudad de México y luego en Edomex...
Recuerdo como ayer ese olor a tierra mojada de la empedrada calle de Navarrete, aroma que se combinaba con el de los libros nuevos, los perfumes con fragancia de jabón palmolive, colgate o camay de los estudiantes; por ley natural era obligatorio llegar bien bañaditos y oliendo a limpio (al menos el primer día de clases)..
Una nueva experiencia se abría en mi vida, nuevas amistades seguramente conocerían... En fila y con el sistema de "pares y nones" se hicieron dos grupos de primero, yo y mi hermano Roberto tuvimos la suerte de estar en el mismo y con la Maestra Angelita Orozco Méndez de quien eternamente tendré agradecimiento y gratos recuerdos...
Conocer la vieja casona que albergaba a mi escuela, recorrer sus dos patios y la inolvidable huerta de nogales fue una nueva historia; la añorada "campanita" que marcaba cuatro tiempos: la entrada, salida al recreo, regreso al salón y la bendita hora de salida a comer... y en la tarde regresábamos a las tres para salir a las cinco...
Inolvidables maestras y Maestros... Como ya dije, la Maestra Angelita Orozco M. quien me condujo hasta aprender a leer, aún recuerdo aquellas hermosas canciones que nos enseñaba, por ejemplo: "La Feria de Atitán", "La escuela de los Perritos" entre varias más...
También mi muy querida Maestra Ventura Alba, la Maestra Elvira Rodríguez, Carmen Segundo (que me dio clases en segundo) El Maestro Francisco Reyes, la Maestra Melania; la querida Maestra Carmelita Hernández que fungía como Directora; el inolvidable Maestro Severiano Espíritu Pérez quien coadyuvó en mi afición favorita: La Banda de Guerra, con nuestro Instructor Estrella, Don Alfredo Saavedra Martínez...
Aquellos inolvidables ensayos para el 16 de septiembre y el 20 de noviembre... llegar a esos días de festejo cívico y marchar por las calles de Pátzcuaro con marcial galanura, ante la mirada de satisfacción y aplausos de nuestros padres y parentela... que casi siempre se apostaban en la esquina de Romero y Navarrete...
Por esos tiempos no era obligatorio haber asistido al Jardín de Niños, ni tener edad máxima, Recuerdo alumnos de hasta 15 años cohabitar en el vetusto edificio con pequeños de 6 años... Pero había respeto... para el maestro Severiano, recuerdo era obligatorio que nos aprendiéramos aquellos artículos que están casi al final del libro y que se titulaban "Mi Servicio a México... "Todo un compendio de patriotismo y valores morales!"...
Desgraciadamente tuve que abandonar esa escuela... malos entendidos (lo latoso de mi hermano "El Roga" fue una de las causas) obligaron a mis padres a inscribirme en La Vasco de Quiroga, pero los tres años que estuve forman parte de mi vida y los llevo en lo más profundo del corazón...
Una de mis grandes satisfacciones, para las dos escuelas primarias fue: convivir con los maestros y maestras muchos años después... ¡como compañeros en el noble, bendecido y honroso ejercicio de la docencia!..
Cada vez que paso por la escuela Ricardo Flores Magón y La Vasco... hago recuerdo de los y las docentes que ayudaron a mi formación... me llega al corazón hacer una oración por los que ya se adelantaron en el camino de la eternidad...
Para ellos y ellas... ¡Mi agradecimiento Perenne! La Primaria Ricardo Flores Magón, semillero de muchos sueños..